Finalistas Concurso restringido, Mayo 2012
Situacion: Herviás, La Rioja
Clientes: Bodegas Señorio de Villarrica
presupuesto: 6 millones de euros
colaboradores: Julio Ordax, Anton Pena Auge
El Lugar
El edificio busca su acomodo en la parcela siguiendo la lógica del territorio, del soleamiento, de la máxima pendiente marcada por la escorrentía del arroyo y por tanto se desvincula del artificio de la infraestructura de la autopista cercana. Al modo de aquellos asentamientos surgidos en torno a la fundación de un monasterio, de un palacio, o de una Catedral, La bodega y la piezas que la acompañan definen y configuran ante todo una plaza y un jardín. Asumimos el cambio de paradigma de la bodega Riojana como espacio productivo conformando un entorno próximo al del polígono industrial, hacia el modelo de “villa” en cuanto que sucesión de espacios abiertos de calidad en la que la experiencia de pasear entre los edificios del complejo ha de ser muy cercana a la de recorrer los magníficos espacios públicos del cercano Briones o Santo Domingo. Un lugar de lugares cualificado y controlado en escala y textura, enraizado en el territorio.
Villarrica
La nueva Bodega entendida como palacio, jardín y villa se convierte en referencia del paisaje que acompaña, en hito, como lo son el campanario de la Asunción en Briones, el castillo de San Asensio o las cumbres de Valdezcaray. El cambio del modelo Nave-polígono al modelo Palacio-villa cambia radicalmente la escala de la intervención y su percepción. De la arquitectura industrial conservamos, sin embargo la precisa geometría de una crujía que se repite que nos remite a la propia organización del proceso productivo a la disposición de las barricas, de las botellas, de los depósitos de fermentación y que revisita una larga tradición de tipología civil y comercial como son las lonjas medievales y renacentistas. La disciplina de la organización funcional en planta que sugiere la lógica productiva tiene su contrapunto en el rol social, cultural y de representatividad que asume hoy una bodega. La multitud de espacios requeridos por el programa se entienden como oportunidad y así cada uno de ellos se ajusta a una escala, a un volumen, a una proporción, a una identidad y encuentran su sitio con naturalidad en la precisa trama que define la crujía en planta. De este modo a cada crujía la define una sección diferente que se corresponde con la diversidad de matices de espacios de lugares y acontecimientos que sugiere un programa complejo. Esta riqueza de escalas y secciones organizada sobre una trama extremadamente precisa configura la imagen de la bodega como villa y palacio como suma de partes, de lugares y de ambiciones.
La plaza del señorío
El recorrido social y representativo se organiza en una secuencia de espacios de escala decreciente que comienza en la puerta sur junto a la autopista. La bodega se presenta en escorzo, acentuando su volumetría y su relación con el paisaje, lucernarios, huecos de disparan hacia el horizonte como almenas, y torres de un castillo. La pieza auxiliar propuesta, y la fachada oeste de la bodega definen una plaza representativa de llegada refrescada por una gran lámina de agua y por diversas plantaciones de frutales. No es un lugar de aparcamiento, ni de paso sino un espacio de sosiego y estancia, una oportunidad para el desarrollo de actividades al aire libre. Desde ésta plaza y cruzando la lámina de agua accedemos a la bodega gradualmente, a una de calle entre muros de piedra matizada por dos olivos y un puente. Dos accesos enfrentados definen dos maneras diferentes de recorrer la bodega:_A través del espacio administrativo y de tienda recorriendo el puente en un recorrido en planta primera mas controlado en el que la visita a los espacios productivos y de bodega pueden estar restringidos. _Un acceso en planta baja directamente al espacio productivo. En planta primera se acomoda la mayor parte del programa social y representativo, salas de reuniones cocina, comedores sala de usos múltiples, todos ellos con ventilaciones cruzadas e iluminadas según dos orientaciones que permitirán un control climático más eficiente. Desde esta planta y en relación con el espacio de cocina se accede a la torre de la bodega y del mismo modo es posible la visita al espacio de bodega, de fermentación y de cata. La estacionalidad del proceso productivo pérmite difuminar los límites del programa productivo y social creando ámbitos de usos múltiples y de oportunidad así los espacios de trasiego de planta baja pudieran destinarse a espacio de celebración de acontecimientos sociales de cierta envergadura.
La piedra y la madera
una bodega construida con los mismos materiales que las históricas ciudades de Briones y Sto Domingo la misma piedra de sus palacios castillos y catedrales de sus calles y plazas, colocadas y despiezadas según la estereotomía que la ultima tecnología permite. Sobre muros de hormigón de 35 cm se despliega una fachada transventilada de piedra de 10cm espesor perfectamente aislada térmicamente nos aporta una gran inercia térmica que facilita las condiciones de isotermia requeridas. Interiormente el hormigón visto y tintado en el tono de la piedra se reviste de un entablado de roble sin tratar que define y matiza los espacios mas representativos.Los pavimentos exteriores se resolverán según los métodos tradicionales de enlosado y adoquinado del entorno. Se propone un pavimento de Terrizo estabilizado bajo las plantaciones de frutales y en el encuentro de la bodega con el límite sur de la parcela. En el entorno de la fachada norte y este donde se han de realizar actividades vinculadas a la producción y el tráfico pesado se propone un pavimento de hormigón rastrillado. Los pavimentos interiores serán de hormigón pulido pigmentado. Las distintas condiciones de humedad relativa y temperaturas de estabilidad requeridas por las diversas fases del proceso productivo del vino se ven favorecidas por la disposición de las estancias requeridas acondicionadas climáticamente de manera independiente con una instalación de frío-calor. La iluminación se produce de manera natural y directa en planta primera permitiendo una relación visual con el entorno y el paisaje lejano. En planta baja la iluminación directa solo se produce de manera puntual, controlada y muy focalizada, siendo la solución habitual de manera indirecta mediante grandes lucernarios de manera que el aporte energético en el ámbito de trasiego y producción este muy limitado.